Descripción de los negocios
La principal actividad del Grupo Aguas Nuevas es la prestación de los servicios de abastecimiento de agua potable y de saneamiento de las zonas en las que opera. Estos servicios están regulados por ley y fiscalizados por la Superintendencia de Servicios Sanitarios.
A través de sus filiales en regiones, el grupo de empresas Aguas Nuevas está presente en la puerta de entrada a Chile por el norte, en pleno sur y en el extremo sur del país, prestando los servicios de captación, producción, distribución, recolección, tratamiento de aguas servidas y disposición de las mismas, en beneficio de sus más de 386.000 clientes.
En la Decimoquinta y Primera Región, Aguas Nuevas presta sus servicios a través de su filial Aguas del Altiplano, que representa en torno al 3,1% del mercado sanitario nacional y cuyo mayor número de clientes se concentra en las ciudades de Iquique y Arica. Éstos superan los 138.000 en toda el área de concesión.
En tanto, en la Novena Región opera Aguas Araucanía -la mayor de las empresas regionales del Grupo-, donde atiende a más de 201.000 clientes en 35 comunas, correspondiendo el mayor número de ellos a las comunas de Temuco, Angol y Villarrica. Esta concesión sanitaria equivale al 4,5% del sector sanitario en Chile.
En la Duodécima Región, finalmente, presta sus servicios a través de su filial Aguas Magallanes a más 47.000 clientes, distribuidos mayoritariamente en Punta Arenas, Puerto Natales y Porvenir. Dicha filial atiende al 1,1% de los clientes del sector a nivel nacional.
A partir de 2008, Aguas Nuevas decidió comenzar a diversificar sus actividades y convertirse en una empresa que se preocupa del medioambiente de forma integral, para lo cual creó la filial Enernuevas, a fin de participar en el negocio de la generación eléctrica, aprovechando oportunidades ligadas a los negocios sanitarios que desarrollan las otras filiales del grupo.
En octubre del 2010, EnerNuevas inauguró sus dos primeras centrales hidráulicas, las que fueron bautizadas como El Toro 2 y Alto Hospicio, cada una de ellas aporta1,1 MW al Sistema Interconectado del Norte Grande (SING). La inversión necesaria para la construcción alcanzó los US$5 millones, y demoró cerca de 1,5 años. Las centrales utilizan la energía hidráulica que se genera en la aducción El Carmelo, principal fuente de abastecimiento de agua de la ciudad de Iquique. La significativa diferencia de altura del recorrido que sigue el agua desde su origen, en la Pampa del Tamarugal, hasta su llegada a Iquique, en la costa, es transformada en energía eléctrica.